domingo, octubre 02, 2011

Técnicas para ayudar a la mujer adolescente a repeler a los tíos y decir que no

Un hecho universal en este planeta de locos es que ser mujer conlleva muchas responsabilidades, sobretodo en el ámbito sexual. Así pues, es el sexo femenino el que suele llevar las riendas, y por consiguiente la palabra final, que puede concebirse en forma de si o en forma de ni lo sueñes. La palabra final es aplicada a situaciones que responden desde preguntas que incitan al acoplamiento masculino espontáneo “te acompaño a -lugar a donde pretendes ir sola y tranquila-?”, hasta preguntas que intentan convertir de fantasía a realidad lo único en lo que ha estado pensando el individuo masculino desde que supo de tu existencia “¿Nos liamos ya o quieres otro chupito?” o, en los peores casos, “¿Echamos un polvo?”. En cualquiera de estos casos y de lo que ocurra entre uno y otro, la mujer es la que tiene la última palabra y el hombre adopta un comportamiento mas sumiso, a menos que la mujer vaya ligeramente ciega de alcohol, donde perderá el control y su palabra final no solo será si, sino que también será insistente.